EL MATERIAL ADECUADO EN EL LUGAR ADECUADO
Desde Madera y Construcción, Toca Madera·Sounds Wood y otros blogs especializados del sector maderero hablamos mayoritariamente de este material constructivo, pero no porque sea el único material válido o porque haya que hacerlo todo con madera, sino porque lo que no se conoce, no se protege y no se pone en valor.
La buena arquitectura es aquella que dispone cada material constructivo accesible en el lugar más idóneo para ello, pero ¿cómo vamos a saber dónde colocar la madera si no la conocemos? Madera, metal, hormigón y otros materiales son igual de válidos para la construcción, simplemente tendremos que conocer el cómo y dónde de cada uno de ellos para conseguir una impecable arquitectura. La única barrera existente para su utilización es el desconocimiento.
Arquitectura híbrida.
A menudo se habla de “materiales mixtos” para justificar el uso de varios materiales, quizá de forma menos académica, y a menudo en oposición a la idea de que es más noble utilizar un solo material. Pero la realidad es muy distinta. Durante toda la historia de la humanidad hemos construido con lo que encontrábamos cerca, desarrollando cada vez construcciones más útiles, avanzando de forma empírica, según nuestro conocimiento sobre los diferentes materiales.
La combinación de distintos materiales es una hibridación, un acto voluntario y creativo del hombre, concibiendo un conjunto de las mejores características y propiedades de los materiales.
No hay hormigón sin refuerzo de acero, no hay cemento sin arcillas y no suele haber estructura de madera sin herrajes. Todo depende de la mezcla de materiales, pero esto también lo hemos olvidado.
Multidisciplinar.
Podemos trabajar de manera individual, pero si colaboramos entre nosotros, el recorrido y el impacto que podamos generar seguro que es más interesante. Apoyando la construcción desde un ámbito multidisciplinar conseguiremos mejores rendimientos y metas.
Un gran ejemplo de esta multimateria, tanto a nivel técnico como constructivo, es el proyecto de oficinas próximo a la estación de Rosa Parks, en París.
Rosa Parks es una de las entradas ferroviarias a la ciudad, y en los últimos años ha experimentado la transformación urbanizable de sus alrededores. En las últimas décadas hemos visto como las zonas periféricas de las ciudades, las proximidades a las estaciones de tren se han convertido en parques del sector terciario, centralizando estas nuevas zonas.
Este edificio de oficinas, de 8.670 m2 de superficie, es una construcción emblemática que emerge en medio del territorio. El conjunto, diseñado con modelos 3D, se organiza en torno a un núcleo central de hormigón, incluye la circulación vertical, y las instalaciones sanitarias. El edificio de oficinas está compuesto por una estructura de hormigón en planta baja y 8 niveles superiores de estructura de madera y otros amigos materiales de la construcción.
La madera en todas sus formas.
En total, se utilizaron 510 m3 de madera laminada de abeto GL24h, 61 m2 de madera maciza de abeto C24 y 1500 m2 de CLT de abeto, con certificación PEFC y FSC. AIA fue la ingeniería encargada de la estructura maderera.
Forjado
Se decantó por una estructura mixta de madera-hormigón. Una solución que combina las habilidades de ambos materiales. El forjado acanalado está compuesto de una estructura de vigas y pilares y una fina losa, conectada a la madera, de hormigón de 11 cm.
El entramado de viguetas tiene una longitud de 135 cm, con una distancia de centro a centro de las viguetas también de 135 cm. La estructura de pilares se dispone cada 270 cm, garantizando la estabilidad de la organización espacial de la oficina. La capa de hormigón está formada por una pre-losa prefabricada de 5 cm y una losa de compresión reforzada de 6 cm colada in situ.
La masa de la delgada losa de hormigón, unida al sistema de falso suelo ligero, evita la transmisión de ruidos sólidos y aéreos para garantizar el confort acústico de los usuarios, obteniendo una rápida instalación.
El diafragma de arriostramiento formado por esta losa ha servido para liberar las fachadas de cualquier tipo de elementos estructural para este fin, permitiendo la instalación de un muro cortina de altura completa. El entramado de madera vista libera los niveles para que sean totalmente accesibles a los usuarios.
Debido a la ubicación del edificio, la cimentación tuvo una gran complejidad, la cual no se vio aumentada debido a la ligereza de la estructura de madera. Para desacoplar acústicamente las vibraciones de la red de trenes próxima se instalaron cajas de muelles. Este elemento también ayudo a aliviar el peso de la estructura.
El proyecto y estudio de la acústica fue desarrollado por la ingeniería AVEL.
Cubierta
La estructura de cubierta está formada por 25 travesaños, separados a la distancia de la retícula de los pilares, 270 cm. Todos son diferentes para realizar un tejado curvo, cuya forma evoluciona para revelar buhardillas a medida que aumenta la pendiente. En esta zona el CLT se mantiene visible, para el disfrute del espacio de los usuarios.
El diseño del proyecto en 3D ha permitido trabajar con formas únicas, las cuales se han materializado en fábrica, como por ejemplo con las piezas de zinc rojo de la cubierta.
Fachadas
Este sistema constructivo se diferencia según como interactúa y dialoga con su contexto. Las fachadas paralelas a las vías del tren y a la ciudad se resolvieron de una forma y las perpendiculares a estos ambientes se ejecutaron con otra solución.
Enclavado en un mundo ruidoso de vías de tren, es importante ofrecer un muro no reverberante. Por ello, las fachadas se diseñaron en zinc y madera, combinando geometrías libres que oscilan entre 17 y 35 cm de la vertical, de esta manera se consigue difractar el sonido y limitar su propagación. Manteniendo la estética de una fachada parisina, con ventanas abuhardilladas.
Las fachadas de menor dimensión y libres del contacto directo con la vida de la ciudad y del ferrocarril se realizaron con muros cortina de vidrio, madera y aluminio. La combinación de la carpintería en el exterior, resistente a la intemperie, y de la madera al interior aseguraban la armonía de los espacios interiores, apoyados en el confort visual que aporta la madera, generando un ambiente cálido.
El desarrollo técnico de las fachadas lo gestionó la ingeniería RFR.