REFERENCIAS ARQUITECTÓNICAS

Figura 1. Marcel y Connie Breuer, New Canaan, Connectitcut (1949)

El post de hoy queríamos dedicarlo a algunas referencias arquitectónicas que han sido, y son, esenciales para nuestro estudio de arquitectura. El objetivo de este artículo es reivindicar la construcción en madera dentro de la arquitectura contemporánea en contraposición a una labor docente universitaria donde habitualmente la madera, y sus sistemas estructurales, no son dignos de estudio.

Entendemos que el olvido del estudio de la construcción en madera, viene motivado a que parte de la comunidad docente asocia su uso al “ámbito rural”. Es una asociación absurda ya que en el ámbito rural encontramos bellísimos ejemplos de arquitectura contemporánea y, contrapone modernidad a un concepto de ruralidad distorsionado. El ámbito rural como concepto despectivo y folclórico.

Nada más lejos de la realidad, hoy hablaremos de Marcel Breuer, uno de los grandes maestros de la arquitectura contemporánea del siglo XX, y daremos ejemplos que desmitifican la estigmatización de la arquitectura en madera.

Marcel Breuer

Marcel Breuer se especializó en todos los campos de la arquitectura. Empezó diseñando mobiliario interior en Europa donde en 1921 construyó su primera silla en la Bauhaus. Posteriormente, se instaló en EEUU donde en los primeros 20 años dedicó todos sus esfuerzos a diseñar casas unifamiliares. Finalmente, en sus últimos 20 años de carrera, centró sus esfuerzos en obras monumentales hasta su retiro en 1976.

Figura 2. Silla S35 (1929)

En nuestro artículo nos centraremos en el periodo de casas americanas de Marcel Breuer y analizaremos su capacidad de trabajar con sistemas constructivos locales.

En opinión de Antonio Armesto «las casas americanas de Marcel Breuer llegaron a representar entre los años cuarenta y setenta, el canon de modernidad confortable. No sólo para los arquitectos, sino también para el público, y no solo en Estados Unidos, sino también en Europa y otros lugares. Resplandecían con una claridad y una transparencia que ahora, con cierta perspectiva, sabemos que eran virtudes derivadas de una calidad intelectual y no de meras sensaciones. Hacían referencia a una aspiración cultural; conseguir formular la casa del hombre contemporáneo como sincretismo de valores permanentes: la conservación de la vida y de la salud, la alegría del contacto con la naturaleza, la armonía de las relaciones entre sus habitantes, el disfrute de los avances técnicos, etc. Las casa denotaban economía, eficacia, orden, elegancia, y transmitían la noción de domesticidad sin necesidad de recurrir a anacrónicas o cursis iconografías»[I]

Diálogo entre la naturaleza y la arquitectura

Breuer tenía muy claro que toda obra arquitectónica es una construcción artificial hecha por el hombre. Según sus propias palabras “un edificio es un trabajo hecho por el hombre, una cosa cristalina, construida. No debería imitar la naturaleza sino ponerse en contraste con ella. Un edificio está hecho de líneas derechas, geométricas; incluso allí donde éstas son libres, debería quedar siempre claro que han sido construidas, y no el resultado de un crecimiento. No puedo encontrar ninguna razón por la cual los edificios tengan que imitar formas naturales, orgánicas o en crecimiento“[II] .

El arquitecto húngaro rechazaba frontalmente la idea de mimetizarse con la naturaleza pero, a la vez, era capaz de diseñar unas obras que creaban una armonía increíble con su entorno inmediato gracias a su capacidad de adaptar técnicas constructivas tradicionales (muros de mampostería y sistemas balloon frame). Esta habilidad constructiva le permitía resolver uno de sus principales enfoques filosóficos: el aparente conflicto entre naturaleza y arquitectura.

Breuer, a nuestro parecer, consiguió desvincular la arquitectura moderna de un concepto basado en la producción industrial desligada de su entorno inmediato. Sus casas, con una reinterpretación de las técnicas constructivas locales, representan el canon de modernidad confortable con una práctica, consciente o inconscientemente, ecológica encomiable.

Tipos de vivienda unifamiliar: Binocular y Long Plan House

Marcel clasificó sus obras en el campo de la vivienda unifamiliar en 2 tipos de casa / proyectos:

• Binucleares: Obras introspectivas, arraigadas al terreno, características por crear patios entre las diferentes alas de la vivienda.

Figura 3. Casa Hooper 1956 – 1959

• Long plan houses / cottages: Proyectos inspirados en las farm houses europeas, de madera básicamente, poco arraigadas al suelo natural y, a la vez, asomadas al paisaje.

En función del tipo de casa, Breuer ejecuta las construcciones con diferentes técnicas constructivas. Todas ellas con un importante papel de la madera.

Las casas binucleares, arraigadas al suelo, basan su ejecución en muros de carga pétreos y cerámicos donde la cubierta, generalmente, es de madera y genera el contrapunto ligero y cálido.

En cambio, las long plan houses, están construidas a partir de entramados ligeros de madera (platform frame o balloon frame) generando suelos volados sobre muros o pies derechos. Como consecuencia, la madera se convierte en el material predominante y omnipresente.

Figura 4. New Canaan 1947-1949

La casa de New Canaan, Connecticut

Es la primera aplicación experimental del modelo de long plan houses que Marcel estaba estudiando. Un modelo ideal de casa de verano adaptable al número de habitantes y que recrea la imagen de la cabaña en el bosque, asomada sobre el paisaje.

Es una casa destinada a vivienda permanente, para el propio Breuer y su familia, y se caracteriza por ser una caja apaisada, platform frame, depositada sobre el basamento y volada en sus cuatro costados. Las fachadas este y oeste, de 23m, descansan sobre cabezas de simples viguetas de madera apoyadas en la crujía de muros inferior y con doble vuelo de 60cm. Se confía la rigidez de los extremos de las largas paredes, vuelan 4.5m sobre el zócalo, al revestimiento de tablas a 45º. Es probablemente, la casa más singular dentro del modelo de cottages; y lo es gracias a las habilidades de Breuer en sacar el máximo provecho de todas las posibilidades que ofrece la madera: capacidad portante, flexión, calidez, textura…

Posteriormente, fue evolucionando el sistema de long plan houses y empezó a entremezclar este tipo de proyectos con el juego de diferentes alas tan característico de sus casas binucleares. Esta mezcla generó nuevos espacios intersticiales que actuaban de pulmón entre las diferentes alas y, al mismo tiempo, era el espacio de relación directa con la naturaleza.

Figura 5. Cottage Wise 1963

La casa Starkey

Uno de sus últimos proyectos de vivienda unifamiliar donde más se puede apreciar la fusión entre los diferentes sistemas proyectuales es la casa Starkey formada a partir de 3 volúmenes independientes. Una de las características más singulares es el sistema estructural, basado en dos grandes pórticos de madera laminada que suspenden el techo y donde se apoya el suelo. Esta exposición clara del sistema estructural inaugura una nueva etapa en la carrera de Marcel Breuer que se verá reflejada en sus obras más monumentales.

Fijaros en la terraza lateral de la casa Starkey. La combinación de diferentes soluciones de barandilla (opaca por un lado, y los cables en zigzag por el otro) ayudan a enmarcar el lago y generan un espacio que siempre nos ha asombrado.

Figura 6. Casa Starkey 1954-1955

Para finalizar nos gustaría recomendar un arquitecto actual que nos permite vincular algunos de sus proyectos con las long plan houses de Breuer. Estamos hablando del arquitecto austríaco Bernardo Bader, arquitecto que tiene una habilidad especial para trabajar con la madera y sus obras son especialmente interesantes.

Figura 7. Casa AM, Bernardo Bader

[I] “Marcel Breuer, American Houses”, Nº 17 2001/l 2G Revista internacional de Arquitectura.
[II] “Sun and Shadow”, Marcel Breuer. Año de publicación 1951.

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